miércoles, 2 de diciembre de 2009

Cap01

Hacia ya tres semanas que no veía este techo, hacia ya tres semanas que no sentía su aroma, hacia ya tres semanas que habíamos terminado, pero heme aquí, acostada a su lado, compartiendo su nicho, sintiendo su aroma, teniéndolo entre mis brazos, es acaso mi carne la débil, o nuestro amor mas grande, la verdad no lo sé

Aun en sueños el seguía apretándome, como si no quisiera que se terminara este momento, su piel sigue igual de cadavérica, sus manos igual de tersas, su cabello igual de perfumado y suave, sus ojos aunque cerrados brotan pequeñas lagrimas, debe ser que el aun en sus sueños se niega a aceptar que este es nuestro final. Lamentablemente ya no debemos seguir juntos.

Es cierto nos amábamos como nadie sobre la tierra, y me atrevería a decir que nos seguimos amando con el fulgor de mil estrellas, con la intensidad de la tormenta, pero es tanto el daño que nos hacemos al estar juntos que por mucho amor que nos tengamos no debemos seguir.

Aun recuerdo cuando lo conocí o mejor dicho cuando lo vi, estábamos en el desarrollo de un importante proyecto en el estudio, y por asares del destino llegaste tu, un candidato más a ocupar un cargo nuevo, vestías esa estúpida corbata negra, junto a una linda camisa color vino, un, tus cabellos aprisionados por el gel, pero fueron esos profundos ojos cafés los que llamaron mi atención

Amanda fue la primera en echarte el ojo, cual cazadora fija a su presa, la Cotty hizo su cínico y clásico comentario de que te encontraba lindo, ( digo cínico por que ella te desnudaba con la mirada) yo en cambio me aboque a la entrevista, pues no eras mas que un simple chico, todo aceptado nos pusimos a trabajar

Pasaron unos días, y dejaste de ser tema, todos seguíamos con nuestras vidas, el mundo se caía a pedazos, nosotros seguíamos maqueteando, y aun no cumplíamos los plazos, era un sábado por la mañana, había dejado unos bosquejos en el estudio, subí al ascensor acompañada por mi fiel amante Morrissey, al entrar al estudio mi sorpresa, estabas tu, me hiciste compañía, charlamos un rato, y fue cuando sentí nuestra química, un chispazo, una conexión, no se si seria la música que pusimos de fondo, de los gustos que compartíamos, de los pelambres que propusimos, de las tonteras que hablamos, no se si fue tu aroma a madera, o la estación del año, pero con cada segundo que pasaba mas me embelesabas y mas me hacia adicta a ti.

Paso el tiempo, comenzamos a hablar mas, charlas hasta las 3am, siendo que literalmente compartíamos el mismo espacio, confesiones, llantos, preocupaciones, compartimos y hablábamos de todo, trate de evitarte, hablándote de otros hombres, trate de evadirte, pero de alguna mística forma siempre llegaba a ti, en un momento llegue a odiarte, me salías hasta en la sopa, pero fuera como fuera, siempre llegaba a ti, eras mi Roma.-

Pero hubo un momento en que no dimos más, fue todo reciprocó, la situación simplemente se dio y empezamos una relación, y fue tan ridículo todo, estaba detrás de mi escritorio revisando el correo de unos contratistas, la Isha a mi lado parloteando del ultimo mino que había conocido en un happy hour, que este si era su príncipe azul y que mejor aun era un potro en la cama, y que sabia escuchar, y que la amaba, y todo esto en la primera semana, no se si mi amiga se ilusiona muy rápido o es muy weona, posiblemente las dos. Eran casi las once de la mañana y por alguna extra razón tu el sr puntualidad estaba más que retrazado, no contestabas el celular, y al llamar al dpto solo hablaba con la contestadora, Robin el Junior del estudio entra corriendo a mi oficina, con una cara de exaltado, me dice que es imperativo que salga, lo sigo y lo primero que veo a la salida del edificio es un camino de pétalos de un variopinto de flores, al fondo un arco adornado y bajo este estabas tu con un micrófono y una banda improvisada, nos miramos fijo por unos 10 seg, que para ambos fueron como una vida, y empezaste a cantar, era aquella canción de Morrissey que escuchaba cuando en realidad nos conocimos, no se como te acordaste de eso, me emocione, hasta una lagrima se me escapo y para finiquitar tu macabro plan, te me acercas y me pides ser algo más que amigos, crees que te podía decir que no con semejante escena.


Paso el tiempo, nos desarrollamos sin igual, gracias a ti tuve los mas bellos momentos de mi vida, tambien pasamos ratos amargos y los superamos juntos, recuerdas cuando murió mi madre, cuan destrozaba estaba y tu fuiste el único capaz de reanimarme, o cuando ganamos la licitación del edificio Santa Cruz.

Pero todo lo bueno se fue, y poco a poco nos desgastamos y así llegamos a la noche del 7 de octubre, hace exactamente 3 semanas atrás.-

Habíamos tenido una pelea como hace 3 días antes, una de esas típicas peleas, en donde tu te enojas por pequeñeces y me pides explicaciones, yo te argumento que no seas celoso y una cosa lleva a la otra, nos decimos cosas hirientes, nos sacamos en cara nuestros defectos y por ultimo nos devastamos y corroemos con dagas literales, lloramos, nos decaemos, rendimos menos en la pega y eso se nota en el ambiente, decides renunciar lo que agrava más las cosas y todo se va a la mierda.

Para terminar de cagarla llego el 7 en la noche a la casa para encontrarte encamado con la Isha, ella ni se inmuta con mi presencia, la muy perra, siempre estuvo detrás de ti y jugo sus cartas en el momento en el que estabas mas vulnerable, claro y tu borracho en la cama, salgo tan rápido como puedo, me subo al auto y llegas tu a medio vestir llorando como un mocoso, pidiendo todas las disculpas, pero no hay nada que disculpar.-

Cual traición, cual dolor, perdí a la persona que más amo, en la que mas confiaba, y la perdí para siempre, todo por una puta, o talvez no, quien sabe debíamos haber terminado antes, sin querer puede ser que la Isha nos hiciera un favor, independiente de todo aquello y de que pasaran 3 semanas, 3 semanas en las cuales no supe de humanidad, en las cuales replegué mis fuerzas, comí helado como cerda, vi todas las películas de desamor habías y por haber, trabaje, me encerré y creí haberte olvidado, pero no

Vasto un reencuentro casual, un café, una charla, un ápice de cariño y volviste a darle corriente a mis sentimientos, mandaste a la mierda toda la casa de naipes que construí para olvidarte, una cosa llevo a la otra y estamos aquí en tu cama, como en los tiempos mozos


Tu aun duermes, descansas como un niño, yo sigilosamente me visto, tomo mis cosas, y cual ladrón huyo despavorido de la escena del crimen, debe ser por que muy en mi interior se que si me quedo aquí volvería a ojos cerrados contigo, pero no quero eso, o mejor dicho no quero querer eso, con el dolor de mi corazón escribo una nota, la dejo en tu refri y me voy, me voy para no volver.-

Te deseo lo mejor, que seas feliz, tan feliz como lo fuimos cuando estuvimos juntos, y espero que yo pueda ser feliz sin tu amor

Un beso ............... Sofía